«A PROPÓSITO DE LOS HALLAZGOS EN EL REAL FELIPE »     

Por: Julia Schabauer

Por mi formación académica y por el hecho de haber vivido siempre en La Punta, distrito del Callao, mi interés siempre ha estado centrado en la prehistoria y en los inicios de la historia de El Callao debido a los interesantes eventos ocurridos en nuestra provincia desde la aparición de los primeros cazadores del paleolítico hasta los albores de la independencia del Perú.

En este escenario, la presencia del Real Felipe, no suficientemente valorada para el turismo y como foco generador de identidad chalaca, tiene particular importancia en tanto es un testigo icónico de la grandeza del Callao – y por qué no, del Perú- en tiempos pasados. Por tanto, la realización de un proyecto de excavaciones arqueológicas en el lugar es de suma importancia y necesidad, más para su denominación como patrimonio cultural de la humanidad. Por ello destaco el esfuerzo del programa Progresamos Callao de la municipalidad provincial por haber logrado su ejecución.

En La Punta de mi niñez era muy común escuchar diferentes leyendas en las sobremesas y que nos dejaban muertos de miedo, por cierto: la de la viuda que andaba llorando por las calles del distrito, la del cura sin cabeza que paseaba por el malecón Pardo muy tarde por las noches, la de la ciudad sumergida en los alrededores del Camotal etc. y, por supuesto la del gran terremoto donde se hundió la parte del Callao que estaba unida a la isla San Lorenzo. Con los años, fui entendiendo que eran sólo eso, leyendas…sin embargo el misterio de por qué había calado tanto en el imaginario popular, que parte del Callao se había hundido tras el tremendo terremoto de 1,746, era una interrogante que se mantuvo hasta que, con mis estudios en Arqueología, lo pude comprender.

Hasta donde se sabe a ciencia cierta, un desastre registrado históricamente, causado por la sucesión de dos fenómenos naturales devastadores, como un terremoto de más de 8 ° seguido de un gran tsunami, es el único acontecido en la costa central. Si a eso le sumamos que este evento no sólo significó la destrucción total del Callao antiguo sino la desaparición de la más del 90 % de su población entenderemos por qué a más de 200 años aún sigue vigente en el ideario de los chalacos, especialmente de los punteños y chucuitanos. Por otro lado, la narrativa que afirma que parte del Callao quedó bajo las aguas, es cierta. Existe un fenómeno natural denominado subducción cosísmica que consiste en el desplazamiento de la placa terrestre por debajo de la submarina, de tal manera que se pierde parte de los bordes costeros, quedando el nuevo nivel de mar más hacia tierra adentro.

Efectivamente, muchas zonas agrícolas quedaron sumergidas bajo el mar, inclusive algunas fuentes de la época indican que El Camotal, habría sido parte de La Punta y que correspondería a la sección de terreno que quedó cubierto por el mar. Debo destacar que La Punta y El Camotal, tienen el mismo origen geológico. Aún hoy en día, esta zona conocida como El Camotal, puede ser vista con marea baja. pero por, supuesto, la existencia de construcciones en sus inmediaciones son falsas. Tan cerca habría estado La Punta a la isla que se dice que las personas podían comunicarse con fuertes gritos, de un lado hacia el otro.

Mi gran curiosidad científica siempre ha sido ver in situ los restos de ese mega evento. Intenté alguna vez con un colega realizar excavaciones para ubicarlos, pero las condiciones no se dieron. Sin embargo, gracias a la gentil invitación del gerente de este proyecto, el Arqueól. Hugo Benavides he podido observar los avances en las excavaciones e intercambiar opiniones respecto a los hallazgos. Ver la secuencia de los distintos niveles de ocupación en el real Felipe, fue toda una experiencia, pero cuando a los aproximadamente 3 mts. de profundidad apareció la capa de cantos rodados dejada por el tsunami debajo de la cual se halló un piso de bloques correspondiente a una estructura arquitectónica del Callao antiguo, es decir, del Callao amurallado, de antes del gran terremoto, fue para mí, ver por fin la leyenda hecha historia…la narrativa del imaginario popular se hizo realidad y cómo no recordar las palabras de Ch. Darwin a su paso por El Callao en 1,836 quien luego de observar los restos de cimientos de la muralla y ladrillos arremolinados sobre las piedras de playa dijo: » Pero, ¿A quién en su sano juicio se le habrá ocurrido construir sobre una estrecha franja de terreno? »

La importancia de este proyecto de excavaciones arqueológicas radica en dos puntos. Primero, queda demostrada la importancia de los métodos de la Arqueología para la verificación precisa de los datos mencionados en diversas fuentes y, por otro lado, su importancia como ciencia generadora de identidad. Con los resultados de estas excavaciones y su posterior puesta en valor, no sólo se atraerá más turistas, sino que los chalacos tendrán nuevos vínculos que los identifiquen entre sí y con la historia de su lugar.