RESEÑA: TOKIO BLUES

Ventanilla, 12 setiembre.- Segunda novela escrita por Haruki Murakami, el escritor japonés más prestigioso de las últimas décadas. Siendo Tokio Blues, la que lo catapultó a nivel internacional.

La novela nos presenta a Toru Watanabe quien, a sus treinta y siete años, se encuentra a la espera de descender de un avión en un aeropuerto de Hamburgo, cuando de repente es asaltado por una melodía, Norwegian Wood de los Beatles.

George, Ringo, Paul y John llevan a Watanabe a su adolescencia que está marcada por la vida y por la muerte.

Así Watanabe comienza a evocar su juventud. Recordando así el momento más duro de su vida, el suicidio de su mejor amigo Kizuki de una manera muy trágica. Está perdida marcó fuertemente la perspectiva de la vida para Watanabe, así como también a Naoko, novia de Kizuki y amiga de Watanabe.

A partir de este suceso, se verá fortalecida la relación entre Toru y Naoko. Mientras que Toru, trata de seguir adelante y superar el tormentoso “ayer”, Naoko es arrastrada cada vez más por la culpa, la tristeza y la soledad. Así Murakami representa a la figura de la vida a través de Toru, y a la figura de la muerte mediante Kisuki. Siendo así Naoko quien representa al hombre que es acechado por la vida y de la muerte constantemente.

Pasan años y Watanabe no escatima esfuerzo en salvar a Naoko, quien está hundida en una profunda depresión. En estos constantes intentos de socorro, Toru conoce a Midori, quien es la antítesis de Naoko, llena de vida y hedonista. Esto colocará al joven Toru en una verdadera encrucijada.

Tokio Blues es una metáfora de la vida y de la muerte. La obra introduce la idea de la muerte como parte de la vida y la vida como parte de la muerte.

Sin duda, una novela para entender el amor, la vida y la muerte.

 

Libro: Tokio Blues

Autor: Haruki Murakami

Año de publicación: 1987

SGardel.