Jueves 20 de Junio de 2019.- A menos de 40 días de comenzar los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos Lima 2019, la puerta de entrada del Perú luce con un panorama realmente desalentador.
Y es que a pocos metros del Aeropuerto del Callao, nos encontramos con toneladas de basura arrojadas a las riberas del Río Rímac.
Frente a esta situación, la población exige una urgente limpieza de estos desechos; además de ejecutar un programa de sensibilización para evitar que se continúe perjudicando la imagen del primer puerto.
Por ejemplo, el A.H. Nueva Esperanza del Cercado del Callao, luce prácticamente rodeado de residuos sólidos. Hay ampliaciones que tapan las actividades económicas de los propios vecinos, que en su mayoría se dedican a la compra y venta de productos reciclables o máquinas.
Según la Autoridad Nacional del Agua (ANA), entidad adscrita al Ministerio de Agricultura y Riego (Minagri), en los ríos Rímac y Chillón se han identificado 60 puntos utilizados como botadores de residuos sólidos. En Lima y Callao se encuentran 51 de ellos.
Pierre Foy Valencia, abogado con una maestría en Derecho Ambiental y profesor de la Universidad Católica, explica que algunos ciudadanos utilizan de forma inadecuada el río para eliminar sus residuos porque de esa forma ‘solucionan’ un problema inmediato que no es resuelto por sus autoridades.