DISMINUYE NÚMERO DE EMPRESAS CREADAS ENTRE 2012 Y 2015

Lunes 27 de Junio de 2016.- El dinamismo empresarial (que comprende el ingreso y salida de empresas a nivel nacional) disminuyó en 42,4% entre el 2012 y 2015, es decir que en dicho periodo el flujo de creación neta de empresas se redujo en 65.507 unidades productivas, informó el Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial (IEDEP) de la Cámara de Comercio de Lima (CCL).ç

La reducción del número de empresas creadas entre 2012 y 2015, se debería a la continua desaceleración económica que atraviesa el país, reveló eñ IEDEP de la Cámara de Comercio de LIma.

El IEDEP, con base en información del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), detalló que la creación de empresas netas en el 2012 alcanzó 154.227 pero disminuyó al cierre del 2015 totalizando 88.720.

«De este grupo, la mayoría pertenecen a las microempresas y pequeñas empresas (mypes) siendo un alto porcentaje del sector Comercio y Otros Servicios», manifestó César Peñaranda, director ejecutivo del IEDEP-CCL.

En el sector Comercio el flujo de empresas creadas se redujo en 26.300 mientras que para Otros Servicios la cifra disminuyó en 17.770 unidades productivas. También figuran con importantes cifras el sector Manufactura (-6.268) y Minería (-5.100).

Para el economista, las empresas que operan en cada uno de los sectores basan en gran medida su decisión de continuar o no en el negocio luego de evaluar sus resultados financieros que muchas veces dependen de la dinámica del sector.

«Por esa razón es de esperar que si el negocio baja, habrá poco flujo de ingreso de empresas y un mayor flujo de salidas, tal como figura en el reporte de los últimos años», precisó.

En este contexto, César Peñaranda planteó redefinir políticas más efectivas que mejoren la productividad y competitividad empresarial y a la par reduzcan la carga regulatoria y se efectúen los ajustes pertinentes en materia laboral y tributaria que afecta la operación de las empresas y desincentivan la formalización de un mayor número de ellas.

«También compete al empresario peruano comprender que mejorar la productividad no es una carga para las empresas sino una necesidad, ahora que los mercados externos se amplían gracias a los acuerdos comerciales», anotó Peñaranda.