
Ventanilla, 22 noviembre 2017. En las puertas del hospital de Ventanilla, amanecen cada mañana, no importa si hace frio, lluvia o calor, pero están ahí.
Algunos hicieron unas pequeñas chozas, que fueron desalojadas, pero ahora solo ponen el colchón para dormir, pero siguen ahí, a pocos metros de la comisaría de Ventanilla, mientras vecinos, transeúntes y pacientes del hospital caminan junto a ellos imperturbables.